Me encanta estar de nuevo ante vosotros para poder desarrollar lo que ahora mismo es un monólogo, pero que espero que con el tiempo pueda convertirse en variopintos intercambios de ideas.
El tema que hoy nos concierne ha estado dándo vueltas en mi mente varias semanas, y no son pocos los que en mi ambiente más cercano me han oído hablar de mis intenciones con este asunto.
El tema que hoy nos concierne ha estado dándo vueltas en mi mente varias semanas, y no son pocos los que en mi ambiente más cercano me han oído hablar de mis intenciones con este asunto.
Hoy inauguramos una nueva sección en nuestro querido espacio virtual, algo que de toda la vida se ha denominado “modas y tendencias”. Al principio choca un poco escucharnos a nosotros mismos hablar de las modas, dado que regentamos un Blog en el que se defiende que en nuestra city no hay ninguna moda, y a la vez las podemos encontrar todas. Una forma bonita que podemos aclarar como que en Madrid cada uno hace lo que le da la real gana.
Pues bien, de esto básicamente trataremos el día de hoy. De la Moda de no estar a la Moda y de la Tendencia de no preocuparse por las Tendencias.
Pero como somos gente civilizada y no queremos crear dolores de cabeza antes de tiempo, le otorgaremos un nombre y un orden.
Estamos hablando, como algunos ya habrán deducido, de los llamados Hipsters. Y es que cada vez es menos común sorprenderse por la calle al ver gente vestida con ropa de nuestros abuelos, (recién comprada, faltaría más), combinada con lo último en tecnología.
En sinMdeModa defendemos toda personalidad que te permita ir por la calle como te salga de la imaginación sin preocupaciones por lo que le dirá la vecina del 4º a tu madre cuando te vea.
Y dado que la ambigüedad de este movimiento nos viene como anillo al dedo para comenzar con nuestra sección, iniciaremos nuestro relato de lo que está trancurriendo en la capital.
Estamos hablando, como algunos ya habrán deducido, de los llamados Hipsters. Y es que cada vez es menos común sorprenderse por la calle al ver gente vestida con ropa de nuestros abuelos, (recién comprada, faltaría más), combinada con lo último en tecnología.
En sinMdeModa defendemos toda personalidad que te permita ir por la calle como te salga de la imaginación sin preocupaciones por lo que le dirá la vecina del 4º a tu madre cuando te vea.
Y dado que la ambigüedad de este movimiento nos viene como anillo al dedo para comenzar con nuestra sección, iniciaremos nuestro relato de lo que está trancurriendo en la capital.
Cuestiones éticas a parte, comenzaremos por lo primero que se valora, la imagen.
¿Que se ve por Madrid?
Vintage por aquí, vintage por allá, hace tiempo que lo pasado ha vuelto a las calles y a los centros de reunión urbanos. Los arcones de nustros antepasados se han abierto y en ellos se ha encontrado un fondo de armario de lo más curioso.
No hace falta decir que, recursos literarios a parte, nuestros Hipsters Madrileños se compran la ropa nueva. Dejando de lado accesorios únicos que puedan encontrar en su amado Rastro, su personalidad tiende a ser bastante escrupulosa con las cosas que se ponen.
Y como la personalidad se antepone a todo, no se puede dejar de añadir el toque de distinción con los complementos y las barbas.
¿Que se ve por Madrid?
Vintage por aquí, vintage por allá, hace tiempo que lo pasado ha vuelto a las calles y a los centros de reunión urbanos. Los arcones de nustros antepasados se han abierto y en ellos se ha encontrado un fondo de armario de lo más curioso.
No hace falta decir que, recursos literarios a parte, nuestros Hipsters Madrileños se compran la ropa nueva. Dejando de lado accesorios únicos que puedan encontrar en su amado Rastro, su personalidad tiende a ser bastante escrupulosa con las cosas que se ponen.
Y como la personalidad se antepone a todo, no se puede dejar de añadir el toque de distinción con los complementos y las barbas.
Un MacBook Air descansa sobre la mesa de una cafetería con unas Ray Ban Wayfarer sobre su tapa y un Caramel Macchiato al lado con un Muffin...
De no ser porque el dueño no se despega de ello ni loco podrías deducir en su ausencia que se trata de un Hipster. Y es que en los tiempos que corren lo antigüo está muy bien, pero no perdamos el norte. No por llevar ropa de hace décadas vamos a desconectarnos del mundo.
De no ser porque el dueño no se despega de ello ni loco podrías deducir en su ausencia que se trata de un Hipster. Y es que en los tiempos que corren lo antigüo está muy bien, pero no perdamos el norte. No por llevar ropa de hace décadas vamos a desconectarnos del mundo.
Esta “Forma de expresión, estilo de vida o postura del momento” combina a la perfección lo antigüo y lo nuevo, sobre todo si tiene impresa una manzana en aluminio.
Podemos deducir que, sea su intención o no, lo Hipster está de moda. Se llevan los cuadros, los pantalones pitillo remangados y las capas y capas de ropa.
En Madrid se estila el pelo despeinado y secado al viento,(cosa que me encanta), se adora el producto “HandMade” y se degusta comida orgánica al más puro estilo Jobs.
Desde la iniciación de muchos en Independance Club, la música Indie se lleva.
A través de los cascos del Ipod se pueden atisbar sonidos de Oasis, Bell and Sebastian, Margot & The Nuclear o de Arcade Fire. Y porque llevar vinilos en el metro es un poco engorro...
Podemos deducir que, sea su intención o no, lo Hipster está de moda. Se llevan los cuadros, los pantalones pitillo remangados y las capas y capas de ropa.
En Madrid se estila el pelo despeinado y secado al viento,(cosa que me encanta), se adora el producto “HandMade” y se degusta comida orgánica al más puro estilo Jobs.
Desde la iniciación de muchos en Independance Club, la música Indie se lleva.
A través de los cascos del Ipod se pueden atisbar sonidos de Oasis, Bell and Sebastian, Margot & The Nuclear o de Arcade Fire. Y porque llevar vinilos en el metro es un poco engorro...
En las manos se pueden observar creaciones de Jack Kerouac o Allen Ginsberg y en los discos duros se están descargando películas de Jim Jarmush o de Wes Anderson.
Todo ello disfrutado desde una perspectiva alternativa y con el incansable intento de romper con los convencionalismos sociales.
Y es que no importa quien seas, como vistas, que escuches o que leas. Si sigues tu propio gusto sin importar lo que opinen. Si le das más valor a la personalidad que a lo que “se lleva”. Y sobre todo, si se te distingue entre la multitud.
Puedes decir que tienes un pequeño Hipster dentro de ti.
Virtualmente vuestro M.L.M
P.D. Si al leer este artículo has decidido que has encontrado la “Tendencia de tu vida”, te dejamos un link que te puede servir de iniciación en este mundo
http://www.glamour.es/placeres/cultura/articulos/quiero-ser-hipster-los-25-pasos-imprescindibles-convertirte-en-uno/17992
Todo ello disfrutado desde una perspectiva alternativa y con el incansable intento de romper con los convencionalismos sociales.
Y es que no importa quien seas, como vistas, que escuches o que leas. Si sigues tu propio gusto sin importar lo que opinen. Si le das más valor a la personalidad que a lo que “se lleva”. Y sobre todo, si se te distingue entre la multitud.
Puedes decir que tienes un pequeño Hipster dentro de ti.
Virtualmente vuestro M.L.M
P.D. Si al leer este artículo has decidido que has encontrado la “Tendencia de tu vida”, te dejamos un link que te puede servir de iniciación en este mundo
http://www.glamour.es/placeres/cultura/articulos/quiero-ser-hipster-los-25-pasos-imprescindibles-convertirte-en-uno/17992
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